Descubro en youtube, que "So payaso xerecista" es una mezcla de la popular canción de Extremoduro con las imagenes del "hincha" del Xerez, que se dedica a incordiar al seguidor cadista, hasta que le arrebata la gorra con el desenlace final, escupirla y quemarla.
Bueno, las peñas cadistas están intentando, mediante un escrito al Xerez C.D., que el individuo sea indentificado y suspendido de acceso a cualquier recinto deportivo. Esta claro, con esas aficiones piromaniacas bien podría ser vigilado de cerca por el seprona.
Así, con estas palabras, no quiero contaros ese suceso, puesto que ha salido en varias televisiones, incluso canal+ hizo el video que está colgado en youtube,... Lo que quiero contaros es que esta acción no es la primera vez que la realizan, desde ese particular modo de sentir unos colores, estos pseudohumanos.
Recuerdo un verano del 2002, Trofeo de El Puerto de Santa María, y un Cadiz C.F.-Xerez C.D. de por medio. Desde Puerto Real, decido ir con un amigo. Cual fué mi sorpresa, que al llegar a la altura del Hotel Caballo Blanco, camino del Estadio José del Cuvillo, hay una verdadera batalla campal. Aficionados xerecistas, imagino que solo los de baja calaña, decidieron que no pasaran de ahí ningún aficionado cadista, lo que implicaba persecuciones carretera a través, lanzamiento de todo lo lanzable, y lo que tras un rapido tirón del banderín que colgaba del espejo del coche, significaba salvar los cristales, como mínimo.
No se ni como , pero llegamos a cruzar esa trinchera y llegamos al estadio, por allí carreras con la policía de unos seres que, tras más de media hora de partido todavía, no habían entrado en el recinto deportivo, y no deberían de haberlo hecho nunca más.
Una vez en la taquilla, por fortuna no llevábamos ningún distintivo cadista, pudimos comprar entradas. Al ser la primera vez que acudiamos, como espectadores, a ese estadio, no sabiamos que existian dos tipos de entrada, tribuna y otra para el resto del recinto. Por motivos económicos pillamos la general, y entramos. No sin antes escuchar protestas por el color de las entradas, amarillas para mas inri. Allí nos esperaba otra sorpresa, toda esa grada era una marea azul, y en la esquina izquierda una minoria cadista, pero minoría de no más de 20 personas. Antes había habido un éxodo a la grada de tribuna a traves del terreno de juego, evitando los posibles problemas que pudiera generar quedarse allí. Al llegar nosotros, como el partido estaba apunto de comenzar, ya no se pudimos hacerlo.
Un hombre, que sabía que jugaba el Cádiz en El Puerto, pero que no se enteró que era contra el Xerez, se llevó a su hijo de unos 5 años, vestido del Cádiz y con una bandera, un niño inocente y tan feliz con su ropa de fútbol y su bandera. Un niño que si le dan una bandera de color butano y lo visten de árbitro iría igual de contento.
Pués visto lo visto, no colocamos en la zona izquierda, donde estaban los pocos aficionados cadistas. Mirabas para la derecha y parecía que corría Fernando Alonso, una marea azul. Desde ahí, oimos al padre decir, que si llega a saber que era contra el Xerez no hubiera traido al niño, pero el chiquillo ignorante de todo estaba disfrutando con su bandera.
Ya en el descanso, al acercarse ese hombre al bar le dice otro pseudohombre, que prefería tener un hijo "mongolo" a que fuera del Cádiz, eso debió decir su padre y se le cumplió.
Al comienzo de la segunda parte, un pseudohomohabilis le roba la bandera al niño, se la lleva corriendo a la zona donde estaba el resto de la manada y le prenden fuego. Tuvimos que agarrar al hombre, que se iba para los desaprensivos, puesto que era cometer una locura ante el grupo bastante numeroso.
El resto del partido ese niño lo vivió llorando, a excepción de las celebraciones de los dos goles cadistas, momentos en que se le olvidaba un poco.
No se me olvida tampoco el gesto del típico gadita que se le acerca y le dice: "no te preocupe pisha. Ira! er cadi va ganando doh a sero, y ademá yo te voy a da una cosa mejón" se saca las llaves del bolsillo, saca las llaves del llavero, se las echa, sueltas, en el bolsillo y le da el llavero, un llavero con el escudo del Cádiz C.F.
Y yo pienso, ¿os parece fuerte lo del hombre de la gorra? Si hubierais visto el episodio del chaval de ¡¡¡5 años!!!.
Pues nada, espero que esto llegue a ser conocido por la máxima gente posible, y recordar que ese día perdio el Xerez C.D. que militaba en 2ª división con el Cádiz C.F. que estaba en 2ªB por 2 a 0. El otro día 1 a 4 en Chapín. Anécdotas lamentables que se mezclan con victorias y sobretodo la imagen imborrable del aquel gol de Oli que quedará para una historia inolvidable, y eso si que no se puede quemar.
