24.9.06

Negro cómo el Azabache V

Tal cómo llegamos a la lonja, con nuestros nuevos amigos de Valencia, vimos el panorama gastronómico y tiramos de cabeza para la ducha a quitarnos el pestazo. Aunque nos quitan en la misma playa, antes de montarnos en el camión, los monos blancos y los tiran a contenedores, pero te traes toda la peste metida en el cuerpo. Al llegar a Muxía te recogen los guantes, botas de agua y los monos de trabajo de tela, para el día siguiente, ellos le ponen tu nombre y un equipo de voluntarios se dedica a lavarlos, y para el día siguiente. Entonces nos fuinmos al pabellón para coger los bartulos de la ducha y al lado de nuestros colchones, había mas colchones nuevos, es decir llegaron mas personas. Valencianos. Pero estos eran de otra expedición, eran de la Univesidad, y al lado nuestra coincidía que había bartulos femeninos, que a la postre resultarían de unas muchachas muy simpáticas y que hacían Tai Chi.
En la lonja, nos pusimos en fila para recoger la comida y nos pusieron los platos llenos hasta los bordes, de todo. Además, había un menú vegetariano, cosa que nos enterariamos después, gracias a las Tai Chiistas. Nos pusimos, como el birolo, junto con nuestros nuevos amigos valencianos.
Fuimos a tirarnos un rato en los colchones, una siestecita, que no venía nada mal. Y por el camino conocimos a tres chavales de 17 años, eran madrileños, pero dos de ellos que eran hermanos, habían nacido en Cádiz, por eso se nos acercaron, ya que empezaban a conocernos todos el pueblo ya cómo "los cadi". Esos niños estaban un poco zumbados, habían ido a limpiar, con un tio que conocían, vivían en su casa y él les mandaba las tareas a realizar, como por ser menores no les dejaban acercarse al chapapote, se pusieron a limpiar las playas de latas y basuras. Bueno, al final llegamos al pabellón y echamos una siesta de campeonato, cuando nos despertamos empezamos a jugar a las cartas con las muchachas de al lado, que ya nos conocían del día anterior, (esta no eran de Valencia).

3 comments:

malatesta said...

Conocía la anécdota de los valencianos, sólo que en la versión de tu compañero de fatigas eran catalanes, o así lo entendí yo.
Esto se va poniendo interesante. Avisa cuando cuelgues el siguiente capítulo, que si no no me entero.

El Kalandraka said...

Mi compañero de fatigas con tal de contar algo no repara en los detalles.

totito said...

Detalles, eso es lo que yo quiero leer, a ver que detalles eres capaz de inventarte. yo no me creo na de lo que cuentas, pero esta bonito.

vamos al sol

vamos al sol